21 febrero 2009

Se prevé caída del 20% en un año

La previsión es de Tinsa y ha generado cierto malestar en los promotores: «No hay semana sin la perceptiva estadística sobre el precio de la vivienda. Hoy, ha sido la sociedad tasadora Tinsa quien ha publicado su Índice de Mercados Inmobiliarios Españoles de enero que eleva al 10% la caída del precio de los pisos en los últimos doce meses. Además, de cara al futuro, la vivienda se abaratará más de un 20% al cierre de 2009 con un descenso sostenido de entre 1 y 1,4 puntos porcentuales al mes.»

«En rueda de prensa, el director general de la tasadora, Luis Leirado, ha señalado que 2009 ya arrancó con un descenso de los precios del 10,1%. Se trata del primer descenso de dos dígitos registrado hasta ahora, que además es 1,3 puntos porcentuales superior al experimentado al cierre de 2008, del 8,8%. La razón de estos descensos es la caída de la compraventa de viviendas, lo que también ha provocado una acumulación de 930.000 pisos en stock al término del pasado año. Tinsa prevé que esta bolsa de viviendas sin vender alcance el millón y medio de unidades en 2009, lo que continuará presionando a la baja los precios.» "Tinsa prevé que el precio de la vivienda caiga un 20% en 2009".

07 febrero 2009

Las plusvalías se evaporan

Un reflejo del momento que vive el sector es el titular de la portada del suplemento "Su Vivienda", el mismo que hace cuatro años destacaba la rentabilidad de las plusvalías inmobiliarias: «Mi casa cuesta lo mismo que hace cinco años. O menos». El articulo de la publicación de El Mundo toma como ejemplo el caso de María:

Si María vendiera ahora el piso que compró en 2003 no se podría llevar ni un céntimo de beneficio por la transacción. Y eso con mucha suerte. La vivienda por la que abonó 130.000 euros a sus antiguos propietarios hace cinco años vuelve a costar lo mismo un lustro después. «Teniendo en cuenta que aparte tuve que pagar alrededor de 18.000 euros por las escrituras, impuestos y demás ahora perdería dinero».

No hace falta ser matemático para echar las cuentas. Una tasación realizada en 2005 decía que la casa de María, un quinto sin ascensor de 30 metros cuadrados situado en el barrio de Prosperidad, estaba valorada en 180.000 euros. Por inmuebles similares en la misma zona se vuelve a pedir hoy lo que tuvo que desembolsar ella cinco calendarios antes.

La anécdota es un reflejo de lo que cualquier lector puede comprobar con las páginas de clasificados de los periódicos. La categoría de pisos de hasta 150.000 euros, desaparecida o, en el mejor de los casos, exigua durante meses, vuelve a aglutinar numerosas ofertas en casi todos los distritos de Madrid. Además, no es demasiado exótico que vayan acompañadas del epílogo «negociable» o «precio a convenir».