30 diciembre 2008

La ruina del ladrillo

Con el final de este año 2008, la prensa está haciendo el balance de la crisis desatada por el pinchazo inmobiliario. A destacar este reportaje del suplemento económico de El País por el cambio que describe en el sector:

La crisis ha derrumbado multitud de mitos. No se ha salvado ni uno de los más arraigados en España: que el valor de la propiedad inmobiliaria nunca baja. Pues sí lo hace, y bastante. Pero para que la leyenda haya acabado hecha añicos se han tenido que venir abajo otros cuentos que no hace tanto contaban administraciones y empresarios. Uno de ellos, que las inmobiliarias españolas eran las más solventes del mundo o que estaban a salvo de la crisis financiera internacional. Hoy nadie se atreve a decirlo.

El imperio del ladrillo que se fraguó a comienzos del siglo XXI se ha desvanecido por completo. El concurso de Habitat, el segundo mayor de la historia, ha rematado el desplome. Las grandes gestas de sus protagonistas -Luis Portillo, Fernando Martín, Bruno Figueras, Enrique Bañuelos, Román Sanahuja...- se antojan hoy enormes fiascos. Ninguno de ellos resistió el estallido de la burbuja inmobiliaria, que se infló a base de construir y crecer a espaldas de la demanda real, con una elevadísima deuda y la compra indiscriminada de suelos, muchas veces con independencia de su calificación. Los analistas todavía no ven el final de los procesos concursales. (...)

Si bien todavía se desconoce cuántos procesos quedan -ni si éstos desembocarán en la liquidación de las sociedades-, sí está claro que se ha roto el tablero empresarial y que está naciendo otro. Con otros dueños y otros planes. ¿Quiénes? Los analistas coinciden: la banca lo decidirá.

"Este ladrillo es la ruina", El País (07/12/2008)

23 diciembre 2008

Bajará el precio en 2009 porque ya está bajando

Apenas unos meses después del último informe, un servicio de estudios prestigioso como es el del BBVA nos dice lo siguiente: olvídense de nuestras previsiones pasadas. Porque hasta ahora no nos damos cuenta de que la caída del mercado inmobiliario va a conllevar bajadas significativas en el precio de la vivienda. Qué conclusión si no sacar de la última previsión: si hace unos meses hablaban de un descenso del 2% en 2009, ahora la previsión es que el precio caerá un 5% en 2009 y un 8% en 2010. Y todo a pesar de que estimaciones como la del índice Fotocasa sitúan ya el descenso durante 2008 en el 8,7%.

«El precio de la vivienda en España caerá un 5% en 2009 y un 8% en 2010, según indica el último informe sobre "Situación Inmobiliaria" del Servicio de Estudios del BBVA, que fue presentado ayer. El banco atribuye estos futuros descensos del valor de los inmuebles al exceso de oferta. El estudio señala que la sobreoferta de pisos comenzará a reducirse a partir del segundo trimestre de 2010. El "stock" de viviendas nuevas en manos de los promotores, que ya podría superar el millón de inmuebles, seguirá creciendo hasta alcanzar máximos a principios de 2010, con un ritmo previsto de unas 200.000 visadas al año. A partir de 2010 comenzará a ser absorbido este excedente, con más intensidad en el segundo semestre de ese año. Según el BBVA, hasta 2012 no se recuperarán los niveles de viviendas nuevas en venta similares a los de 2005.» Noticia en Consumer.es.

08 diciembre 2008

La dependencia de la construcción

En este país es habitual escuchar con atención reverencial a los expertos que opinan desde fuera. De tal manera que resaltaremos el diagnóstico que el economista Willem Buiter, profesor de la London School of Economics, realiza sobre la gravedad de la crisis de la construcción en España, aunque no sea muy diferente del que algunos venimos defendiendo hace años:

España, como el Reino Unido, está en peor posición que el resto de los países de la UE, tanto para manejar la crisis global del crédito como por las distorsiones internas de su economía. España ha tenido un sector de la construcción que representaba un 18% del PIB y ésa es una cifra ridículamente alta y totalmente insostenible. Ese porcentaje tiene que bajar y de manera permanente hasta llegar a algo menos de la mitad. Creo que España va a tener que trasladar al menos un 10% del PIB que procede de la construcción a otro sector. El problema claro está es que no es tan fácil transformar constructoras en peluquerías. Así que a España le espera un periodo largo y doloroso de paro estructural, que en parte es debido a un desajuste entre el tipo de mano de obra, los perfiles profesionales y los tipos de puestos de trabajo que van a estar disponibles en el mercado. Además, si bien los grandes bancos españoles no disfrutan de tan mala salud como otros en el continente, los pequeños bancos también se están viendo muy afectados porque están muy expuestos a los vaivenes del sector de la construcción. Es la enorme dimensión de ese sector lo que ha colocado a España en un lugar especialmente vulnerable.

Entrevista a Willem Buiter en soitu.es.